domingo, 30 de mayo de 2010

Comunicado PCPS 26 de Mayo 2010

LA RECUPERACION DE LA CLASE OBRERA NO PASA POR LAS SEIS HORAS SOLAMENTE.

En relación a las seis horas laborales, beneficio reinstalado a los empleados del Estado, sería importante señalar algunas cuestiones para no caer en el exitismo de decir que fue gracias “a la lucha de las masas” o rechazarlo simplemente por considerarlo un privilegio (algo que no es).

La aplicación de las seis horas laborales formó parte de la política populista y prebendaria del dictador Stroessner y el Partido Colorado en la década de los años 60’s para ampliar su clientela política.

En aquella época todo funcionario público tenía que afiliarse al Partido Colorado y era obligado a votar en elecciones fraudulentas. Algunos fueron obligados a servir de informante o integrar las nefastas comisiones garrotes para reprimir manifestaciones estudiantiles.

No puede afirmarse bajo ningún sentido que todos/as aceptaron estos términos de acuerdo. También existieron los seccionaleros, operadores políticos pagados con el salario del Estado.

De manera que los propiciadores de las seis horas jamás pensaron en el derecho que tiene el trabajador de reducir su jornada de trabajo (con el mismo salario) para dedicar más tiempo a la cultura, a su familia, a su formación.

El aparato del Estado paraguayo está sobredimensionado, es ineficiente y se lo sigue utilizando como maquinaria política. Por eso es que se impone una reforma, una transformación democrática, participativa, que le otorgue más transparencia, menos corrupción y más eficiencia.

La medida tomada por el gobierno de ampliar la jornada a ocho horas fue desafortunada e inconsulta, aislada de un contexto de reorganización, de transformación democrática y de una equiparación de salarios y beneficios en función a las horas aumentadas. Tampoco tuvo en cuenta al 20 por ciento de los empleados que no gana el salario mínimo

Con toda la diferencia que genera en relación al resto de la clase trabajadora, la jornada de las seis horas laborales no puede eliminarse porque es un derecho adquirido. Lo ideal sería que todos los trabajadores/as tengan mejor salario, mejor empleo y menos hora de trabajo como parte de una redistribución de la riqueza, que un porcentaje mayor de la plusvalía que produce se lo devuelvan.

Pero hay que aclarar algo. Los parlamentarios no dieron su voto para reimplantar las seis horas laborales porque reconocen el derecho de los trabajadores o porque la gran movilización de masas (que no hubo) les hizo cambiar de opinión (las loas de ciertos dirigentes sindicales, terminada la votación, a senadores colorados, oviedistas y a algunos liberales, lo confirman).

Lo que hicieron fue tomar una medida que permitiría enfrentar al gobierno con los empleados públicos como parte de un plan que tiene por objetivo sacar de la presidencia a Lugo, con juicio político, con golpe o de alguna u otra forma. Para ello, el ejemplo de Honduras está cerquita. Pero aún así el Poder Ejecutivo no debe vetar la ley.

La situación de la clase trabajadora en Paraguay y el tema sindical es un tema profundo que no pasa solamente por la jornada de las seis horas. Hay algunos ejemplos claros: los trabajadores sindicalizados son poquísimos, sin embargo, hay cinco o seis centrales sindicales. En cada ministerio u oficina pública hay tres o cuatro sindicatos. En las empresas privadas ocurre lo mismo como parte de las disputas de centrales y de dirigentes. Hay un amplio sector que no está organizado y un gran porcentaje que no gana el salario mínimo, que no tiene ninguna seguridad social.

El protagonismo obrero atraviesa por una crisis debido a la burocracia sindical, a los golpes de las patronales, a los recortes aplicados en las últimas décadas por las políticas neoliberales y a una estructura económica en que el sector fabril es débil.

Pero esta situación no nos debe llevar a afirmar que esto será así siempre, sería una torpeza pensar así. La clase obrera tiene un lugar propio que debe ocupar. Hace falta una reflexión serena y profunda que no debería pasar sólo por nosotros sino por muchos más afectados/as por esta situación. Y no pasa por fundar nuevas centrales solamente.

Es necesario abrir un debate amplio y encarar con honestidad las tareas que se avecinan, descartando las prácticas viciadas que llevaron al sindicalismo a la situación actual.

COMITÉ EJECUTIVO

Partido Convergencia Popular Socialista.

Asunción, 26 de mayo 2010.-

viernes, 7 de mayo de 2010

Comunicado Frente guazú sobre Ley antiterrorista

Asunción, 7 de mayo de 2010

Las libertades civiles estan primero

La aprobación por el Senado de la Ley Antiterrorista en la sesión del jueves pasado sienta un negro precedente para las libertades ciudadanas. Impulsada tras el manto de la lucha contra los secuestros y actividades criminales, puede llegar a ser lesiva de los derechos democráticos fundamentales de las organizaciones de la sociedad civil.

El riesgo es precisamente ese, con el objetivo legítimo de extirpar la delincuencia terrorista se llega a aprobar una ley cuya tipificación del terrorismo es tan amplia (terrorismo es cualquier acción hecha para generar terror), que abre el canal de interpretación para que acciones de reclamo de derechos sociales, elementales en cualquier democracia moderna, queden enmarcadas como actividades criminales.

Las libertades ciudadanas en nuestro país, conquistadas con una lucha tesonera de demócratas de todos los colores, pueden quedar seriamente reducidas con la aprobación de la Ley. En el proceso de democratización actual de nuestro país no podemos dar espacio a recortes a las libertades ciudadanas, ello implicaría una derrota seria al proceso.

Los que luchamos por la democratización de nuestro país y quienes queremos un Paraguay sin exclusión social no podemos sino rechazar cualquier ley que pueda resultar limitante de los derechos democráticos de la ciudadanía. Para construir un Paraguay mejor tenemos que hacerlo en libertad y democracia.

El Frente Guasú rechaza la ley antiterrorista y acompana la postura de los senadores Sixto Pereira y Carlos Filizzola. La construcción de un Paraguay democrático no puede hacerse sin el respeto absoluto a la lucha reivindicativa pacífica de los sectores sociales.


Frente Guasú

jueves, 6 de mayo de 2010

Comunicado EU-CP 6 de Mayo 2010

De hipocresías y antiterrorismos


Las organizaciones miembros del Espacio Unitario-Congreso Popular, nos dirigimos a la opinión pública para expresar cuanto sigue:


1- Denunciamos que esta cruzada mundial para la aprobación de leyes antiterroristas (que en su versión paraguaya será analizada y muy probablemente aprobada hoy jueves, 6 de mayo en la Cámara de Senadores) ha sido iniciada a raíz de los atentados a las Torres Gemelas, el pasado 11 de setiembre de 2001, por lo tanto, nace de la más profunda hipocresía del Gobierno de los EEUU, pues el mismo recurre a un supuesto combate al terrorismo para legalizar el control y saqueo de los recursos humanos y naturales del mundo. Como ya no puede aludir a la lucha contra el comunismo entonces se vale de la lucha contra “el terrorismo” cuando que los gobiernos de dicho país tienen el récord de mayores intervenciones terroristas en la historia de la humanidad.


2- Nosotros, por principio, combatimos al terrorismo y hemos sufrido sus consecuencias, por lo que abogamos por una definición, por parte del Estado paraguayo, de qué es terrorismo, pues no podemos dejar la definición de terrorismo en manos de jueces y fiscales. Decimos esto porque en la historia reciente de América Latina y de nuestro país, el terrorismo nos ha golpeado brutalmente y ha sido introducido, justamente por el país que actualmente está por detrás de la aprobación de leyes antiterroristas.


3- Entendemos que así como está redactado el proyecto de ley antiterrorista, una vez aprobado, constituirá un grave retroceso a las libertades públicas y se sumará al convenio con Colombia (de setiembre de 2008), al Plan Umbral con el que los yanquis penetraron el Dpto. de Identificación y el Ministerio Público y al asesoramiento policial del gobierno narcoterrorista de Uribe, que en su conjunto perjudican enormemente el desarrollo y la profundización de la democracia en nuestro país.


4- Como EU-CP, nos sentimos responsables y protagonistas de este proceso de cambio (cuyo eje central es la lucha por defensa y la profundización de la democracia), por lo tanto nos vemos en la obligación de disentir y cuestionar al Presidente Lugo y de combatir este tipo de medidas, puesto que resulta sumamente grave sentar las bases para el perjuicio del movimiento popular, que a la sazón es la única garantía con la que cuenta el gobierno de Lugo y el proceso de cambio para avanzar hacia una democracia con justicia social y sostener este proceso contra los conspiradores y golpistas.


¡Por un incluyente debate público con la ciudadanía, sobre terrorismo y legislación antiterrorista!


¡Por el efectivo combate a los verdaderos terroristas, latifundistas y narcotraficantes!


¡No solo votamos, también participamos!


Asunción, 6 de mayo de 2010

sábado, 1 de mayo de 2010

Comunicado PCPS 1 de Mayo

El Partido Convergencia Popular Socialista (PCPS) saluda a todos los trabajadores y trabajadoras en su día.

El 1 de mayo celebra la organización y la lucha de la clase obrera en contra de la explotación y por mejores condiciones laborales y de vida.

Recuerda a los trabajadores perseguidos por reivindicar sus derechos, a los miles de hombres y mujeres que pagaron con su vida por enfrentar con valentía a los poderosos como ocurrió con los obreros de Chicago en 1886.

Reclama un salario digno, la jornada de ocho horas para todos, el seguro social, el cese de la represión, la libertad sindical, derechos que todavía hoy no son respetados por las patronales.

El 1 de mayo es también un día de reflexión, reafirmar que la unidad es necesaria para enfrentar al modelo neoliberal que no ha desaparecido y que sigue intentando recortar derechos y beneficios para favorecer al capital.

El pueblo unido: trabajadores, campesinos, indígenas, mujeres, jóvenes, profesionales, construirá el nuevo país que queremos y rechazará todo intento de los grupos poderosos que hoy quieren volver al pasado, al tiempo en que manebajan el Estado y a los gobiernos en base a sus intereses. Por eso se oponen al cambio, a la reforma agraria, al impuesto a la renta personal, a la reforma del poder judicial, buscan desestabilizar al gobierno y hablan de juicio político.

Por eso no queda otro camino que seguir con la lucha para llegar al objetivo final de la emancipación y soberanía nacional.

1 de mayo de 2010.


DIRECCION NACIONAL